Segunda parte del vídeo. El árabe tiene suerte cuando se encuentra con un semental blanco en el aparcamiento subterráneo. Este tío es pura bestia: alto, musculoso, masculino como el demonio, con vello de macho alfa. Cuando saca su polla monstruosa, nuestro árabe no puede creer lo que ven sus ojos: es enorme, ¡la polla más grande que ha visto nunca! Nuestro hombre de Oriente Medio ataca esa enorme carne como si estuviera hambriento, haciendo garganta profunda a esa enorme polla blanca y oliendo esas bolas sudorosas que huelen a pura masculinidad. El semental blanco está caliente como el fuego, gruñendo de placer. El dios de los músculos se folla al árabe sobre el capó de un coche en el oscuro aparcamiento. Acción hardcore que hace gritar de placer a nuestro árabe.